
El Natural Hazards Workshop 2019 –organizado este año por el Natural Hazards Center de la Universidad de Colorado–, reúne a investigadores, funcionarios públicos y privados, organizaciones gubernamentales nacionales, regionales, y municipales, ONGs, y todos aquellos expertos dedicados a la reducción del riesgo del desastre. Se trata de un encuentro donde se desarrollan trabajos colaborativos para aumentar la comunicación entre los investigadores de amenazas y/o desastres, y permitir la vinculación entre las organizaciones que estén trabajando activamente para reducir los desastres de origen natural.
Desde CIGIDEN asistió a la conferencia, la investigadora principal de la línea de investigación sobre “Evaluación socioeconómica para la mitigación del riesgo de infraestructura crítica”, Alondra Chamorro y el coordinador de la línea, Eduardo Allen, y el investigador principal de la línea “Tecnologías emergentes y comunicación para la reducción del riesgo de desastres”, Gonzalo Bacigalupe. De acuerdo a los científicos, la actividad permitió recibir retroalimentación sobre modelación de amenazas, evaluación del desempeño de la red y cómo poder presentar de mejor manera a la comunidad y a los tomadores de los resultados de las investigaciones.
Convergencia y desastres
El tema del workshop 2019, fue la “convergencia”, a través del cual se estableció el diálogo para la mesas, posters, talleres, representaciones artísticas, y otras actividades. Las temáticas abordadas, en tanto, fueron tan variadas como la resiliencia de redes críticas, el cuestionamiento de la relación que deben tener los profesionales y las comunidades, y las recomendaciones sobre cómo conectarse mejor entre quienes toman decisiones en gestión del riesgo y los investigadores, por ejemplo.
La convergencia implica equipos que trabajan juntos más allá de la disciplina, asegura el investigador Gonzalo Bacigalupe. “Para nosotros en CIGIDEN, agrega el experto, esto es central y en nuestro título de una de nuestras presentaciones empujamos el tema aún más: ‘Producir una ciencia interdisciplinaria del desastre no es suficiente. La participación ciudadana es esencial: el caso de Chile’. Por eso, que para resolver problemas complejos y enfrentar problemas sociales y ambientales –que son los que pueden culminar en un desastre–, el diagnóstico del problema y movilizar distintos actores es central y urgente”.
Como concluimos en el taller, plantea Bacigalupe, la ciencia del desastre es una ciencia de la urgencia y de la compasión, del cuidado por el otro: “Las personas no son simples números, cada individuo es una historia, las que cambian o se destruyen cuando ocurre un desastre. Pero existe un costo en el intento de converger, se necesita tiempo, rigor, humildad y paciencia. Muchísimas de esas cualidades que no se asocian con la reducción del riesgo del desastre, porque usualmente las personas lo entienden simplemente como una emergencia que requiere acciones donde unos pocos deciden. En la sesión final se nos llamó a todos a ser catalizadores de esta convergencia».
Vulnerabilidad y potencial riesgo
A juicio de Eduardo Allen, durante la conferencia CIGIDEN pudo mostrar a otros centros, la investigación que se desarrolla en relación a la vulnerabilidad y exposición de la red vial nacional frente a eventos naturales. “Lo más enriquecedor de este encuentro fue poder compartir con investigadores de otras universidades y centros, y crear vínculos de potenciales futuras de investigaciones. Esto en base a un problema común que es la vulnerabilidad y potencial riesgo que experimentan las redes de transporte, frente a diferentes amenazas naturales como sismos, volcanes, tsunamis o aumento del nivel del mar”, explica.
A modo personal, agrega el investigador, la experiencia fue muy valiosa para comprender la dimensión e importancia de los problemas de investigación que se aborda en CIGIDEN. “Al mismo tiempo, de poder cuantificar los esfuerzos que se están desarrollando a nivel internacional para reducir los efectos de los eventos naturales en la sociedad, que no solamente afecta la infraestructura, sino que también las relaciones personales, las emociones y los sueños de las personas”, concluye Eduardo Allen.
L5. Evaluación socioeconómica para la mitigación del riesgo de infraestructura crítica
L6. Gobernanza ciudadana
22/07/2019